La violencia entre los seres humanos es tan cotidiana, tan habitual, que se puede correr el riesgo de “normalizarla”, es decir, llegar a considerarla como el único instrumento básico para resolver los conflictos interpersonales. Son muchos los tipos de violencia que padecen las sociedades: por jerarquía, por enfrentamiento entre etnias, por motivos económicos, edades, sexo…
Sin embargo, todas las modalidades de violencia tienen algo en común: Los impulsos de alguien (una persona, grupo, nación...) para controlar a otro con el fin de preservar una "posición" de dominio y poder. La mayoría de las veces, quien se propone ejercer el control, utilizará todo tipo de recursos a su alcance para someter y subordinar a los demás (persona o grupo vulnerable) al precio que sea, incluso, recurrirá a la violencia en cualquiera de sus manifestaciones con tal de lograr su objetivo.
En el caso de la violencia de género, la “normalización” de la violencia ha sido aceptada durante siglos. Aún hoy, es "naturalizada" en gran parte del planeta, y los datos son absolutamente aterradores, pues según algunos estudios, cada año mueren en el mundo 4.000.000 de mujeres víctimas de la violencia.
Así, la muerte o invalidez a causa de la violencia de género constituye, a nivel mundial, la primera causa de muerte en las mujeres. Otro dato interesante que debemos resaltar es que la mayoría de los casos de agresiones, abusos y de violencia ejercida sobre las mujeres, son cometidos en sus propios hogares a manos de sujetos conocidos, familiares, novios, esposos, parejas o ex parejas.
¿Por qué se normaliza la violencia contra las mujeres?
La educación, los estereotipos, la cultura machista, entre otros factores, contribuyen para que muchas mujeres normalicen o naturalicen la violencia. Así, el hecho de estar sometidas a abusos, vejaciones, humillaciones, desprecio y control constante sobre sus vidas por parte de sus parejas, forman parte del código de las relaciones. Resulta inconcebible, pero en muchos lugares, la gran mayoría de las mujeres tienen “normalizado” que existe una jerarquía entre sexos, en la que la mujer queda subordinada al hombre, quien pasa a ser “el propietario” de sus vidas.
De ahí que sea tan importante saber detectar las causas, tipos y medidas a adoptar en caso de violencia de género. Dicho conocimiento es el instrumento más eficaz para prevenirla, así como fomentar una educación que incluya el fortalecimiento de la autoestima femenina, promover una cultura de equidad, de respeto y de autonomía.
Nunca estará por demás tener presentes los principales conceptos, definiciones y tópicos acerca del tema de la violencia contra las mujeres, así como algunos pensamientos y razonamientos que nos permitan valorarnos y discernir sobre nuestra autoestima y nuestro valor como mujeres.
En esta ocasión queremos compartir 15 anotaciones, mensajes o reflexiones (como mejor deseen llamarlos) y que nos parece de suma importancia recordar y difundir. Lo haremos a través de unos mini- carteles, a los que llamaremos info-cards, con la finalidad de facilitar la lectura y su memorización. Contienen información resumida y que hemos reiterado en ocasiones anteriores, pero que siempre debemos tener presente.
Mujer, valórate y cambia de mentalidad. Recuerda que nada justifica la violencia y que nadie tiene derecho a someterte.
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MUJER:
NUNCA permitas ninguna clase de abuso ni pases por alto nada que te humille, te lastime, te dañe emocional o físicamente ni que te desvalorice.
